A pesar de que hemos repetido hasta la saciedad, que nuestro socialismo será creación heroica de nuestra gente, no está demás tener en cuenta algunas ideas que vienen de afuera. Por ejemplo ésta, que cae como digna de copiarse. El pueblito de Bundanoon, de Nueva Gales del Sur, es la primera de Australia -y posiblemente del mundo entero- en prohibir la venta de agua embotellada. Según un cable de la BBC, en una asamblea de varios consejos comunales, similares a los nuestros, decidieron terminar con el uso de las botellitas de plástico. El impacto que tienen sobre el ambiente, es muy grande y peligroso, además de encerrar la trampa del precio. Votaron 350 a favor y dos en contra, de los cuales uno era un representante de la industria del agua embotellada.
Agua del chorro y listo
Dice la BBC, que la decisión se tomó luego de que una embotelladora anunciara que iba a extraer agua de una reserva subterránea que hay en el pueblito de Bundanoon, envasarla en Sídney y luego transportarla de vuelta, al pueblo para venderla. Esto no lo aguantó “naiden” y se armó la sanpablera revolucionaria en contra de la trampa capitalista. No se trata de atacar a los que usan botellas, sino instar a que todo el mundo deje la botellita y tome su vaso, lo llene y lo vuelva a llenar, pero con el chorro. Y por supuesto, en otras partes, nos imitarán, por suerte.
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